Creo que cada persona en este mundo tiene temor. Quizás tienes temor de espacios chiquitos. Tal vez tienes temor de lugares altos. Es normal tener temor y muchas veces el temor nos ayuda a sobrevivir. Por el temor de rompernos algo o morir no vamos a saltar de un edificio. Por el temor no vamos a jugar con un león porque quizás va a comernos. Entonces, es normal tener temores en tu vida pero no debemos vivir en temor. No debemos permitir que el temor nos controle.

La Biblia dice en 2 Timoteo 1:7 Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio. Podemos ver que Dios no nos ha dado un espíritu de cobardía. Alguien con un espíritu de cobardía es alguien que siempre está pensando en las cosas malas que puedan pasar. Tiene temor de hacer lo correcto porque tiene temor de otros o las opiniones de otras personas. No está viviendo en fe y obedeciendo a Dios. Su mente está llena de temores y siempre tiene temor de lo que pueda pasar mañana. Nosotros no debemos vivir en temor pero debemos confiar en nuestro Dios! Aquí hay tres cosas que puedes hacer para superar el temor.

Uno, Da tu ansiedad a Dios.

Muchas veces siempre estamos pensando en nuestros problemas. Siempre estamos preocupados por las cosas que están pasando en nuestras vidas. Quizás tú no puedes dormir en la noches porque tu mente no tiene paz. Estás pensando en todos tus problemas. Tienes muchas ansiedades. Cada momento cuando no estés ocupado estás pensando en todos los problemas y dificultes en tu vida. Debes dar tu ansiedad a Dios!

La Biblia dice en 1 Pedro 5.7 echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros. La Biblia dice que debes dar tu ansiedad a Dios. Dios nos está cuidando y nos ama. Muchas veces nosotros no podemos superar nuestra ansiedad pero sí podemos dar nuestra ansiedad a Dios! Da tu ansiedad a él!

Dos, no pienses mucho en el futuro.

Muchas veces no tenemos temor de lo que está pasando en nuestras vidas sino de lo que pueda pasar. Escuchas a tu esposo tosiendo y empiezas a pensar. “El está enfermo. quizás tiene un virus. Creo que se va a morir. Y si el muere, como voy a pagar por esta casa, y si no puedo pagar por esta casa voy a vivir en la calle. Y si vivo en la calle me van a robar y voy a morir de hambre. Y si muero de hambre mis hijos van a crecer sin padres.” Y en 10 segundos tu has matado a tu esposo, tu has muerto, y piensas que tus hijos van a crecer sin padres. Pero la verdad es que tu esposo está bien y no se va a morir. Pero porque estás pensando mucho en el futuro tienes mucho temor. Estás pensando en las cosas que puedan pasar mañana.

La Biblia dice en  Mateo 6.34 Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal. Podemos ver acá que cada día tiene su propio mal. La Biblia dice que no debemos preocuparnos mucho acerca de mañana. No podemos controlar que cosas pasen mañana pero si podemos controlar nuestra actitud hoy. No podemos controlar si estemos enfermos mañana pero si podemos controlar si estamos haciendo lo correcto hoy. Haz lo correcto hoy y no pienses en el futuro mucho.

Tres, busca a Dios.

La Biblia dice en Salmos 34.4 Busqué a Jehová, y él me oyó, Y me libró de todos mis temores. El rey David escribió este salmo. Él estaba huyendo por su vida. El rey Saul quería matarlo. David fingió ser un hombre loco porque pensó que si las personas pensaran que era loco no le hubieran matado. Era un hombre viviendo en temor. Pero qué hizo? Según el versículo podemos ver que él buscó a Dios. Dios le oyó y le libró de todos sus temores.

Debemos seguir el ejemplo de David. Debemos buscar a Dios. Cuando tú tengas el espíritu de cobardía o estés viviendo en temor, debes buscar a Dios! Lee su palabra. Ora y habla con Dios. Pide su ayuda en tu vida. Busca a Dios. Él puede librarte de tus temores. Él puede darte victoria sobre el temor. Busca a Dios!

Hemos visto que a veces vamos a tener temores en nuestras vidas pero no debemos vivir en temor. Debemos confiar en nuestro Dios y dar nuestra ansiedad a Él. Haz lo correcto hoy día y no pienses mucho en el futuro. Busca a Dios y te librará de tus temores. No podemos permitir que el temor nos controle. Debemos vivir en victoria y en fe y no en temor.